¡New York New York!

He estado en ella dos veces. Los propósitos y circunstancias son muy diferentes uno del otro pero igual permanecen en mi historia y mis recuerdos…

Debería comenzar de forma cronológica pero la segunda ocasión fue más corta y de turista. Fui a principio de diciembre de 2011 con mis padrinos quienes me llevaron cuando les fui a visitar unas semanas. Viven a poco más de dos horas de Nueva York y por eso fuimos un día. Recorrimos bastante aunque teníamos poco tiempo. Guiar por Nueva York es simplemente es-pan-to-so. Pasamos por Manhattan (Time Square) en carro y luego estacionamos en Brooklyn. Caminamos al barrio chino en búsqueda de una cartera rosada de la cual estaba antojaba en esos días. Tan pronto encontré algo parecido a lo que buscaba nos fuimos y estacionamos en el Rockefeller Center y vimos el árbol de navidad, las bombillas gigantes y la pista de patinaje. Estaba tan concurrido y faltaba mucho para Navidad. Los estacionamientos son un asalto legalizado. A pesar de todo eso fue un gran día y quiero volver por más tiempo, planificación y presupuesto para recorrer…

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Mi primer viaje…

La primera vez que viaje en un avión fue para ir a Nueva York. No recuerdo la fecha exacta pero se que fue durante la Pascua de 1989. Lo recuerdo porque mami compraba los conejitos de marshmallow que se venden solo en esa época.

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Familiares y amigos nos ayudaron. Todavía tengo dos toallas que la querida vecina de mi abuela me regaló con mi nombre bordado. Muchos años después me dijeron que otra persona nos había regalado los pasajes, para mi fue una gran sorpresa y le estaré eternamente agradecida. Tengo fotos del día que nos fuimos. Vestía un «jumper» largo rosa claro, una camisa de mangas cortas blanca con print de florecitas, una cartera rosa y tenis blancos.

Fui referida por los oftalmológicos que tenía en el Centro Médico para ver que alternativas pudieran sugerir por mi condición de párpados caídos. Condición que afecta mi visión ya que el nervio que se encarga de hacer la función de abrir/cerrar los ojos no funciona y por lo tanto pareciera como si tuviera los ojos cerrados pero no es así. Por eso, desde que tengo uso de razón aprendí a levantarme los párpados con las manos. Nadie me enseñó a hacer eso y al día de hoy lo sigo haciendo inconscientemente. La intención de las cirugías también era que dejará de hacer eso…

Cuando era muy pequeña me hicieron una operación en donde me sacaron un tendón del área del muslo izquierdo y lo implantaron dentro de los párpados con la esperanza de que eso hiciera que el nervio funcionara. Esa operación no cumplió su cometido y ya los médicos no tenían otras sugerencias.

El hospital al que fue se especializa en tratamientos de ojos, nariz y boca pero no recordamos el nombre. Nos quedamos en dos lugares. El primero fue en casa de una de mis tías paterna en Brooklyn y luego en la casa de una gran amiga de mi abuela materna. No tengo muchos recuerdos como tal porque estaba por cumplir los cinco años, solo algunos momentos como la lasagna del avión de American Airlines (no se como pude comer eso), también recuerdo haber visto un poco de nieve caer mientras caminábamos con cuidado de no resbalar, haber ido a Central Park y el detalle que mi mama le compro a mi hermano mayor; un set de plato, vaso y cubiertos de lo que estaba «inn» en esos días, los ¡Teenage Mutant Ninja Turtles. También recuerdo que un día fuimos a una cita desde temprano y salimos de noche. Estaba muy cansada y lo único que quería era irme.

Mi tía era nuestra intérprete porque mi mamá no hablaba inglés y un día nos llevó a su trabajo en una escuela. Mi madre me cuenta el que el director pensaba que me iban a matricular y hasta sugirió que nos quedáramos a vivir allá. Que nos podían ayudar a conseguir vivienda y las ayudas necesarias. Algo que mi madre no hubiera descartado pero todo eso dependía del resultado de las consulta con los especialistas en el hospital.

Como dije en un principio nos quedamos en dos lugares. En casa de mi tía fue el primer lugar y allí compartía a veces con mis primos cuando llegaban de la escuela. El recuerdo más grato que guardo de aquellos días en su apartamento era que el papá de mis primos me preparaba tortilla o revoltillo con «Cheese Whiz». Antes de irse lo dejaba preparado para mi y cuando regresamos a Puerto Rico mami me lo preparaba de desayuno. Algo parecido a lo que se ve en la siguiente foto. . Todavía lo hago ocasionalmente. Les agradezco el tiempo que estuvimos en su casa y todo lo que hicieron por nosotras.

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El Universo Conspira…

Cuando pone Ángeles en tu camino que te ayudan y te guían aun sin conocerte. Esta familia se había radicado allá unos años antes. Ella trabajaba con mi abuela cuando vivía en Puerto Rico y luego mantuvieron comunicación por lo que la única referencia que tenían de nosotras es que eramos la hija y la nieta de una amiga. Aún así nos recibieron en su casa. Aquí viene lo bueno y el significado de que el universo conspira; el hospital al cual tenía que ir quedaba a unas cuadras de la casa y el matrimonio trabajaba en ese hospital. Tenían una hija que era un poco mayor que yo de la cual guardo recuerdos muy gratos. Jugaba mucho conmigo ya que era hija única y durante el «Spring Break» mi mamá la cuido junto a mi. ¡Era lo menos que podía hacer por tanta hospitalidad! Recuerdo que había un parque cerca de la casa e íbamos a jugar. El día que teníamos que regresar fue muy triste para todos, en especial para ellos que se habían acostumbrado a nosotras. Siempre les estaré muy agradecida por todo.
Luego de varias citas y evaluaciones los doctores sugirieron una cirugía estética que le llaman «Eyebrow Lift» que no es otra cosa que el estiramiento de la piel en el área de la frente. Una vez se hace el estiramiento se corta el exceso en el área de la cabeza y la cicatriz queda como una diadema que se va tapando con el crecimiento del cabello. Aunque es un procedimiento estético en mi caso va más allá porque ayudaría a que los párpados se levanten un poco y así pueda tener mejor campo visual.

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http://www.cosmeticsurgeryforums.com/brow_lift.htm

Entonces mi madre hizo la pregunta de los sesenta y cinco mil centavos:

¿Esa operación se puede hacer en Puerto Rico?

A los que los médicos respondieron que si, que podía hacerla un cirujano plástico y me refirieron al Dr. Carlos M. Portocarrero. Así las cosas, mi madre no lo pensó dos veces y dijimos adiós a New York. La comprendo, ella estaba loca por regresar, extrañaba mucho a mi hermano, para ella era difícil estar tranquila mientras estando lejos de mi hermano.

Al llegar a Puerto Rico visitamos al cirujano plástico y para resumir, me han realizado tres cirugías de ese tipo en la medida en que fui creciendo y la piel se iba estirando. Recuerdo con gran cariño y aprecio las atenciones del doctor y su personal. Luego de la primera cirugía, el doctor dejo de trabajar en Centro Medico y seguíamos yendo a su oficina privada. Hizo muchas cosas por mi (que me las reservo). Su dedicación es una muestra de su gran calidad humana. Siempre le estaré agradecida por todo.

Esas cirugías me ayudaron mucho a ampliar mi campo visual. Como todo, hay sus pro y sus contra. Al estirar la piel se levantan los párpados y puedo ver un mucho mejor además de que no voy a envejecer ajajajajajaja

También implica que los párpados no cierran completamente. Eso tiene como consecuencia que los ojos se resequen y si no se mantienen lubricados, se crean cicatrices en la superficie que son muy molestosas y pueden llegar a afectar las córneas en casos extremos. Desde un principio nos lo advirtieron, no fue una sorpresa. Por eso tengo que usar gotas lubricantes para los ojos de por vida para evitar daños. Recuerdo que cuando era niña no entendía esta consecuencia y me resistía a usar gotas o espejuelos. El tiempo es el mejor maestro. Pero hasta el momento estoy bien. Mi visión no es perfecta pero la tengo y lo agradezco todos los días.

Gracias por leerme!